La candidiasis, también conocida como muguet, desde 1838, es una infección provocada por un hongo o levadura que normalmente vive en la piel y dentro del cuerpo (la boca especialmente) en forma saprofita (condición no agresiva), pero en condiciones de cambios en el ambiente que lo hospeda, se transforma en patógeno desencadenando una infección que puede ser leve o grave.
Las infecciones fúngicas graves afectan a 300 millones de personas al año
en todo el mundo, y se estima que provocan 1,5 millones de muertes. Las
distintas cepas de hongos que intervienen en éstas infecciones determinan la
aparición de distintas enfermedades :
ASPERGILOSIS
HISTOPLASMOSIS
PIÉ DE ATLETA
NEUMONÍA
TIÑA
CANDIDIASIS
La infección por éstos tipos de hongos provocan alteraciones como :
OTOMICOSIS
ASPERGILOMA BRONQUIAL
ENFERMEDADES CUTÁNEAS
ENFERMEDADES BUCALES
En numerosas oportunidades pueden afectar gravemente al hígado, corazón y
riñones.
La cándida albicans, suele provocar infecciones en la cavidad bucal por
parte de una de sus distintas especies que son 15, que es una de las más
comunes y no invasiva con algunas excepciones. Puede convivir con la
candidiasis producida en otras partes del cuerpo como la piel, en la que
provoca erupciones cutáneas con mucha picazón. (ver foto)
En las últimas décadas se ha identificado una especie denominada cándida
auris, hongo multirresistente que ha creado un grave problema de salud,
especiálmente intrahospitalario cuyos brotes suelen ser de difícil control,
que eventuálmente pueden atacar la cavidad bucal.
Los síntomas clásicos de la candidiasis bucal incluyen manchas blancas en
las mejillas, lengua, paladar y garganta, a los que se agregan
enrojecimiento en los tejidos vecinos, sensación similar a algodón en la
boca, pérdida del gusto, dolor al comer o tragar y agrietamiento de las
comisuras (perleche, boquera o queilitis angular).
En algunas oportunidades, la lengua se presenta con un color oscuro o
verdoso y puede confundirse con la candidiasis. y se debe especiálmente a la
presencia de otro hongo denominado aspergillus niger, que provoca una
infección oportunista con hipertrofia de las papilas filiformes, inócuo para
los humanos que tiñe la lengua por acción del tabaco o de algunos
medicamentos como la clindamicina.
Los condicionantes de la infección por cándida albicans bucal son
principálmente :
USO DE PROTESIS BUCAL
DIABETES
CÁNCER
VIH/SIDA
EMPLEO DE ANTIBIOTICOS
Y
CORTICOIDES
TOMAR MEDICAMENTOS QUE SECAN
LA CAVIDAD BUCAL
EXPOSICION AL HUMO
El diagnóstico se realiza a través de la inspección, pudiendo en casos
rebeldes recurrir al testeo de laboratorio. La coloración fluorescente que
se observa en la observación microscópica en un frote de tejido, es clásica
de la cándida. (ver foto)
La importancia que se asigna a las enfermedades fúngicas, lo dá el hecho
que en Europa se ha establecido la "Semana de concientización" sobre
éstas patologías y se lleva a cabo en el mes de Septiembre.
En España, el Instituto de Salud Carlos III, auspiciado por el Ministerio
de Ciencia e Innovación Español y la Unión Europea (UE), ha abordado la
instancia de tratamiento de las afecciones provocadas por hongos bajo los
lineamientoos de la IDSA (Sociedad de enfermedades infecciosas de América) y
bajo los criterios GRADE que establece una metodología para formular y
calificar recomendaciones en la práctica clínica.
En general se coincide que rara vez se requiere un tratamiento
medicamentoso para la cándida albicans bucal, y en ciertos casos de
persistencia o agravamiento de las lesiones, puede recurrirse a algún
tratamiento antimicótico tópico, o el empleo de pastillas de nistatina
de 200.000 U 4 veces al día, y en presencia de candidemia o candidiasis
invasiva, puede emplearse el fluconazol a dosis única de 150-250 mg. via
oral, durante 7 días.
La cándida álbicans es un hongo o levadura que integra la comunidad
micobiótica que puebla entre otros, los intestinos, la piel, la vagina y la
boca. Esta especie fúngica que compite con el microbioma, lo hace en un
estado de equilibrio inestable con las bacterias, manteniendo la normalidad
del cuerpo humano.
En su condición de patogenisidad oportunista permanece inofensivo
(saprófito), convirtiéndose en agente patógeno estable ante las alteraciones
del sistema inmunitario o desequilibrio de la flora bacteriana, estrés, uso
de anticonceptivos, antibióticos, inmunosupresores, y otros
determinantes o condicionantes que ya hemos mencionado en párrafos
anteriores. La gripe, el VIH/Sida y la diabetes méllitus también
pueden incrementar la virulencia y agresividad de la cándida que puede
provocar alteraciones graves y la muerte del sujeto portador de dicha
infección.
Resulta imperativa, la consulta al odontólogo ante la aparición de cualquiera de las alteraciones de la mucosa bucal descriptas.
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