No dejo de observar con sorpresa, como los ránkings de universidades varían de un año al otro, como si las casas de altos estudios pudieran en el transcurso de 12 meses ostentar cambios tan apreciables que las hagan ascender o descender en rangos tan amplios como si fueran equipos de fútbol.
Algo no anda bien en dicho aspecto, y ya no caben dudas que los parámetros e indicadores que se emplean para rankear a las instituciones universitarias son altamente falibles, y por lo tanto poco confiables, ya por atender a criterios evaluativos ineficaces, o a situaciones económicas o políticas, lo que sería censurable desde todo punto de vista en la medida que se está incidiendo sobre la reputación de las universidades.
En el último informe de QS World University Rankins correspondiente a 2018, surge una incongruencia con solo analizar las posiciones de las universidades latinoamericanas en el ranking mundial y en el de la región.
Si tomamos las cuatro universidades mejor rankeadas, podemos observar que en el ranking mundial se encuentran ubicadas en la siguiente posición :
Universidad de Buenos Aires posición 75
Universidad de San Pablo posición 121
Universidad Autónoma de
México posición 122
Pontificia Universidad
Católica de Chile posición 137
Si nos remitimos al ranking de universidades latinoamericanas, la ubicación de éstas mismas instituciones es la siguiente :
Pontificia Universidad
Católica de Chile posición 1
Universidad de San Pablo posición 3
Universidad Autónoma de
México posición 4
Universidad de Buenos Aires posición 9
Resulta a todas luces inentendible, como la UBA pasa de estar en el primer puesto de las universidades latinoamericanas a nivel mundial, al puesto noveno en el ranking regional.
El tema referido a los rankings universitarios, requiere de un profundo estudio que ya lo hemos llevado a cabo en publicaciones anteriores del blog, para lo cual remito al lector a las fechas en que se publicaran las entradas correspondientes :
1 de Noviembre de 2011
9 de Julio de 2012
9 de Noviembre de 2012
15 de Enero de 2013
15 de Septiembre de 2015
La calidad o excelencia en la educación superior, es un concepto multidimensional y nunca homogéneo.
Si bien lo que se pretende con los rankings es promover una competitividad global o regional, lo que se consigue a veces es el posicionamiento sesgado de institucioneos a través de una dudosa metodología.
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