Se ha convertido en una inveterada costumbre, por parte de los gobiernos de la mayoría de los paises con independencia de su ideología o signo político, el concurrir a los eventos convocados por las organizaciones internacionales en las que se debaten una múltiple gama de temas relacionados con el bienestar de los pueblos.
En el área de la salud, la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO), etc. suelen ser anfitriones de representantes, y a veces de numerosas delegaciones con rango ministerial cuando no presidencial, que concurren dispuestos a deliberar y promover la redacción de escuetos comunicados, o extensas declaraciones, en las que se comprometen a cumplir con los desafíos impuestos.
Desde la famosa Declaración de Alma Ata en 1978, y pasando por las Reflexiones a Medio Camino de 1988 en Riga en el contexto de la 41 Asamblea Mundial de la Salud, y otras discusiones técnicas llevadas a cabo en oportunidades diversas, se remarcó una y otra vez la imperiosa necesidad de impulsar la Atención Primaria de la Salud como un objetivo imprescindible para promover aquella famosa expresión " Salud para todos en el año 2000 ".
Los días 25 y 26 de Octubre de 2018, a cuarenta años de Alma Ata, la OMS vuelve sobre sus pasos en la convicción de que no se han conseguido los objetivos impuestos y lo hace a través de la Conferencia de Astaná.
y el lugar adecuados, y adaptarnos a condiciones cambiantes.
LA TECNOLOGÍA. La existencia de medicamentos, medios de diagnóstico y otras
tecnologías más eficaces y asequibles, están ampliando la variedad de servicios de salud que
estén disponibles, los cuales deben incluirse
disponibles. Asignaremos recursos suficientes a la investigación, la evaluación y la gestión del
conocimiento, y promoveremos la ampliación de estrategias eficaces para emprender medidas
Resulta muy loable el compromiso de nuestro país con la declaración transcripta. Sin embargo no se observan acciones con resultados concretos ni líneas de trabajo e investigación destinadas a cumplir con dicha finalidad desde 1978. Ni siquiera se han puesto en marcha los mecanismos de recolección de datos que permitan tomar conocimiento del estado de salud general y bucodental de nuestras comunidades. Las evaluaciónes de las necesidades de salud de la población son herramientas indispensables para detectar y luego abordarlas adecuadamente, y juegan un papel importante para el abordaje de los determinantes sociales y de los factores púramente biológicos.
No hay dudas que lo que suscriben nuestros gobiernos como un compromiso, lo asumen luego como una expresión de deseos.